Resistiendo al amor de Mi Ex-Marido

Capítulo 145

Bella miró a Pedro y preguntó: -¿Puedo usar tu teléfono un momento?

-¿Tu teléfono se quedó sin batería? Belongs © to NôvelDrama.Org.

-No, simplemente quiero revisar WhatsApp en tu teléfono. No te preocupes, no tengo intención de husmear en tu privacidad.

Bella fue sincera: -No puedo ver las publicaciones de Sara en mi teléfono, así que quiero echar un vistazo en el tuyo.

Pedro se mostró un poco reacio, pero aún así desbloqueó su teléfono y se lo entregó a Bella.

-Gracias.

Bella tomó el teléfono, abrió WhatsApp y buscó directamente el número de Sara.

Para su sorpresa, encontró algunos mensajes de saludo que Sara le había enviado a Pedro.

Sin embargo, Pedro claramente no tenía ganas de charlar con ella y no había respondido a ninguno de esos mensajes.

Bella abrió la sección de [Historias] de Sara y comprobó que no había bloqueado a Pedro. ¡Todas sus actualizaciones estaban accesibles en el WhatsApp de Pedro!

Solo bloqueó a Bella. Si no fuera porque ella era la nieta del abuelo, Bella no se molestaría en ayudarla.

Reprimiendo su frustración, Bella rápidamente navegó por las historias de Sara.

A Sara le encantaba compartir su vida en las redes sociales, casi todos los días tenía algunas actualizaciones.

Desde lo que comió en la mañana hasta cómo se fue a dormir, todo tipo de publicaciones.

Dos días atrás, una historia captó la atención de Bella.

[Las estrellas fugaces son realmente hermosas. Me pasó algo peligroso, pero por suerte todo salió bien. Resulta que hay alguien que realmente recuerda las cosas que dices al azar. Alegría.] Debajo había algunas imágenes del cielo nocturno, y en una de ellas se veía la silueta de un

hombre.

Tal vez su tía no pudiera reconocerlo, pero Bella reconoció a Daniel por su figura.

Entonces, ¿Daniel acompañó a Sara a ver las estrellas la otra noche y ocurrió algo?

Bella no tenía ninguna duda de que la supuesta situación peligrosa fue ideada por Daniel.

No esperaba que su actuación de “salvar a la damisela en apuros” fuera arruinada, y Daniel ya estaba planeando otra jugada.

No era de extrañar que Sara aceptara su regalo y confiara tanto en él.

No se sabía si lo que sucedió hoy haría que Sara se diera cuenta de algo.

Bella podría investigar los datos reales de Daniel y mostrárselos directamente a Sara.

Sin embargo, Sara podría no creerle. Además, según su conocimiento sobre las acciones de Daniel en su vida anterior, era muy probable que actuara de manera desesperada y causara daño a Sara.

Además, Bella no quería alertar a Daniel demasiado pronto.

Tanto Daniel como Marta estaban bajo las órdenes de Anna. Bella quería encontrar una oportunidad para aprovechar a Daniel y hacer que se volviera contra Anna, que probara el

sabor de ser traicionada.

En ese momento, el WhatsApp de Pedro sonó y Bella, de forma instintiva, le echó un vistazo. Era un mensaje de Anna.

[Pedro, ¿fue bien el viaje de negocios? Hoy me dieron el alta del hospital.]

-¿Qué pasa? ¿Quién mandó el mensaje?

Pedro vio que Bella fruncía el ceño, profundamente pensativa, y se acercó a su lado.

-Míralo tú mismo. -Bella le devolvió el teléfono a Pedro-. Ya terminé, gracias.

Dicho esto, Bella se dio la vuelta y se fue sin intención alguna de quedarse.

Era como si acabara de traerle una taza de té con medicina, solo para tener una excusa para pedirle prestado el teléfono.

Pedro sostenía el teléfono, aún podía percibir el delicado aroma que Bella dejó en el aire.

Abrió WhatsApp y vio el mensaje de Anna, respondió rápidamente con unas pocas palabras y luego volvió a sentarse en su escritorio.

Anna parecía conocer los movimientos de Pedro mejor que ella.

Bella regresó a la habitación y encontró una elegante caja de regalo colocada en un lugar destacado sobre la mesa.