Sr. Ramos, su multimillonaria esposa quiere el divorcio

Capítulo 180

Beata estaba tan enfadada que le dolía el corazón, mirando a Natalie con disgusto.

¡Es por andar con gente de ese tipo que terminas así!

Natalie le sostuvo la mirada, en la cual se llenó una mezcla de indiferente y enojo.

-Lo

Lo

que yo sea no tiene nada que ver contigo..

Beata gritó como una loca: -Si no hubieras arruinado nuestra colaboración con el Grupo Ramos, ¿crees que vendríamos a buscarte?

Natalie, sin ánimos para seguir discutiendo, llamó directamente a Leonardo.

La llamada se conectó pronto.

-¿Qué pasa? ¿Por qué me llamas de repente?

Natalie se rio fríamente y replicó: -¿No era lo que ya esperabas?

Leonardo se quedó callado unos segundos, y cuando volvió a hablar, su voz bajó un poco. -¿ Qué quieres decir con eso?

-Señor Ramos, cancelaste intencionalmente la colaboración con el Grupo López para que la familia López viniera a buscarme y luego me obligara a hablar contigo, ¿o me equivoco?

-¿Dónde estás? ¡Voy para allá!

Natalie respiró profundamente y, conteniendo su furia, pronunció: -Sólo te llamo para decirte que no uses a ellos para buscarme problema. ¡Ya no tengo nada que ver con ellos!

Tras eso, ni siquiera esperó respuesta y colgó.

Por su parte, Beata y Ricardo se quedaron estupefactos ante su acción, y ninguno de los dos habló por un momento.

Después de un ratito, Beata señaló temblando hacia Natalie y, con pánico, le dijo: Natalie, ¿có -cómo pudiste hacerle eso al señor Ramos? ¡Llámalo y disculpate con él ahora mismo!

Si ella terminaba de enemistarse con Leonardo, jel Grupo López no tendría ninguna oportunidad de conseguir una buena colaboración!

Natalie no dijo nada más mientras observaba la enojada mujer que se suponía que era su madre, y simplemente cerró la puerta de golpe, NôvelDrama.Org owns all content.

Si Beata no hubiera retrocedido a tiempo, la puerta podría haberle golpeado en la cara.

Estaba hecha una fiera y espetó en la entrada: ¡Natalie, cómo te atreves a desobedecerme! ¿ Estás loca?

HIS BOHUS

A su lado, Ricardo la observó comportándose como un volcán en erupción, lanzando palabras injuriosas, y no pudo evitar frumcir el ceño.

Él recordaba que ella solia ser tan amable, incluso cuando la adivina dijo que Natalie traerla desgracias a su hogar y él sugirió que debian deshacerse de ella, Beata se limitó a quedarse en la cama, llorando silenciosamente.

¿En qué momento se había vuelto poco a poco así, hasta el punto de ser una completa extraña para él?

Tal vez desde el día en que se dio cuenta de que ya no la amaba, ella había cambiado a sus ojos.

Vuelta a la realidad, Beata siguió regañando un rato hasta que, al no recibir respuesta desde. adentro, finalmente se detuvo.

Se volteó y, al ver a Ricardo, quien la miraba con asombro, frunció el ceño, preguntando: -¿ Por qué me miras asi?

Ricardo recobró el sentido y rápidamente negó con la cabeza. Nada… Parece que no nos abrirá la puerta. Mejor regresemos.

Beata se quedó en silencio por un momento, y estaba lista para salir con él cuando, de repente, escucharon el rugido de un auto.

Ambos voltearon al mismo tiempo y se encontraron con un auto negro Maybach.

Ricardo lo reconoció de inmediato como el auto de Leonardo, y su semblante cambió

automáticamente. Se apresuró hacia allí, mientras que Matilda, quien había estado dentro del auto, también se acercó.

Nada más bajarse, Leonardo escuchó a su lado la suave voz de Matilda:

-Leo, ¿qué te trae por aquí?

Señor Ramos…-Ricardo también se acercó para saludar.

Pero Leonardo ni siquiera les hizo caso, se dirigió directamente a la puerta de la villa y tocó. Natalie, por favor, ábreme. Quiero hablar contigo.

Después de unos segundos, su voz helada salió del interior.

-No tengo nada de qué hablar contigo. Vete.

Capítulo 181