Chapter 81
Chapter 81
Capítulo 81
Sofía, aún impactada por las palabras de Daniel, se quedó paralizada en su lugar.
“La influencia y capacidad de Rafael en San Bernat eran tales que, si intervenía, seguramente podrá encontrar a Leo y Noe rápidamente.”
Aunque en el fondo, Daniel no quería que Sofía tuviera contacto con el padre de los niños, la seguridad de Leo y Noe era lo primordial. Si el caso era obra de profesionales, Rafael era el único en todo San Bernat capaz de rescatar a los niños en el menor tiempo posible.
“¿Quién es el padre de Leo y Noe?”
Camila, confundida, escuchaba sin entender. Si el padre de Leo y Noe estaba en San Bernat y parecía ser alguien muy capaz, ¡deberían pedirle ayuda!
Daniel no dijo nada más, dejando la decisión en manos de Sofía.
Sofía nunca tuvo la intención de ocultar la identidad del padre de los niños, simplemente no vio la necesidad de anunciarlo a todos. Pero en ese momento, con la situación como estaba, no había nada que esconder.
“El presidente de Grupo JK, Rafael, es mi exesposo y el padre biológico de Leo y Noe.”
Camila quedó totalmente sorprendida, estaba que no se lo creía, eso era absolutamente sensacional. Recuperando el sentido, dijo:
“Sofi, no me dirás que el Sr. Amorós no sabe de la existencia de Leo y Noe.” Camila expresó su sospecha.
“Sí, él no lo sabe. Así que si vamos a buscarlo, podría descubrirlo y tal vez quiera llevarse a los niños.” Pero en ese momento, Sofía no podía preocuparse por eso. Frente a la seguridad de los niños, perder la custodia era un mal menor, siempre y cuando estuvieran seguros y bajo su vista. ConTEent bel0ngs to Nôv(e)lD/rama(.)Org .
Camila también se sintió preocupada, pues si se enfrentaban al presidente del Grupo JK por la custodia de los niños, Sofi seguramente perdería.
“Vamos, hermano Dani, por favor llévame al Grupo JK.” Sofía se levantó, secándose las lágrimas, decidida a pedir ayuda a Rafael.
“¿Estás segura?” preguntó Daniel.
“Si, Sofi, ¿estás segura?” Camila también estaba preocupada.
“Sí, he decidido. Nada es más importante que encontrar a Leo y Noe lo antes posible.”
“Está bien, te llevaré.”
Al llegar al Grupo JK con Daniel, Sofía se preparó mentalmente durante el viaje.
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Al detener el auto, Daniel propuso, “Sofi, tengo una idea. Iré contigo y diremos que los niños son nuestros. Así, el Sr. Amorós no sospechará que Leo y Noe son sus hijos, pero pueda que te sientas incómoda.”
“Gracias, hermano Dani.” Sofía pensó que tal vez esa era una buena estrategia. No importaba lo que Rafael pensara de ella, siempre y cuando no descubriera que Leo y Noe eran sus hijos y estuviera dispuesto a ayudar. Pensando en los niños sin ninguna noticia, Sofía no pudo evitar llorar de nuevo.
Con el ánimo recuperado, ambos entraron juntos.
Al intentar pasar, la recepcionista los detuvo con una sonrisa, preguntando a quién buscaban.
“Disculpe, queremos ver al Sr. Amorós.”
“¿Tienen cita?”
“No…”
“Lo siento, si no tienen cita no puedo dejarlos pasar. Podrían intentar llamar al Sr. Amorós primero.” La recepcionista, cumpliendo con su deber, les ofreció una sugerencia.
En ese momento, Ramón entró y al ver a Sofía, se acercó. La recepcionista también notó a Ramón.
“Hola, asistente Ramón.”
Ramón asintió y se acercó a Sofía.
“Sra… Srta. Carreras, ¿han venido a buscar al Sr. Amorós? ¿Necesitan ayuda?”
“Si, ¿podrías llevarnos arriba?”
Ramón echó un vistazo a Daniel, quien estaba al lado de Sofía, tratando de adivinar la relación entre ellos.